Griezmann, Correa y De Paul fueron los responsables de clasificar a los de Simeone en un sufrido juego

Oporto, Portugal

El Atlético de Madrid resurgió en la Liga de Campeones y está en octavos de final tras vencer al Oporto 1-3 con goles de Antoine Griezmann, Ángel Correa y Rodrigo De Paul .

Los lusos arrancaban la jornada como segundos y los españoles como colistas, por lo que la iniciativa ofensiva correspondió a los del Diego «Cholo» Simeone. Aunque el empate no beneficiaba a ninguno en caso de marcar el Milan en San Siro.

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Tras una buena ocasión del Atlético a raíz deuna internada de Carrasco, cuyo centro no remató Griezmann y luego Llorente lo vio parado por Diogo Costa, llegó la noticia del gol del Milan.

Eso hizo apretar los dientes al Oporto, que se veía fuera, y Luis Díaz obligó a estirarse a Jan Oblak. A pesar del empate del Liverpool en feudo de los ‘rossoneri’, en Do Dragao el conjunto local no aflojó el pistón y el Atleti sufría.

El meta esloveno del Atlético tuvo que volver a salvar a su equipo ante una ocasión de Grujic. Les costaba mantener el balón a los de Simeone en el tramo final del primer tiempo. El descanso fue un respiro para los colchoneros.

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Pero el Oporto no pareció acusar el descanso en términos de intensidad. En la reanudación los de Sergio Conceiçao avisaron con sendas ocasiones del iraní Taremi, una desviada y otra que volvió a salvar Oblak. Dos ocasiones nacidas de sendos despistes.

Pero cuando más parecía sufrir el Atlético, apareció la combinación afortunada de goles en los dos escenarios. Griezmann adelantó a los de Simeone en Oporto (minuto 56), al tiempo que Orighi ponía por delante al Liverpool en San Siro. La clasificación daba una vuelta.

Tensión y expulsiones

Pero como el gen de los colchoneos es el sufrimiento, el francés Turpin expulsaba a Carrasco por un lance con el brasileño Otavio y el Atleti se quedaba con uno menos. Solo duró unos minutos, porque Wendell también vio la roja directa por una acción similar con Cunha.

Eso provocó que afloraran las tensiones y vieran la roja integrantes de ambos banquillos. Hasta Simeone tuvo que poner paz entre los suyos. Flaco favor para el Oporto, que se veía distraído en su intento de reacción.

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Los blanquiazules iban perdiendo el criterio a medida que aumentaba su empuje en los últimos minutos. El Atlético se veía obligado a defender, pero las imprecisiones locales se lo ponían un poco menos asfixiante y les otorgaban aire para buscar alguna contra.

Así es como llegó la sentencia, de nuevo con Griezmann como protagonista pero en este caso para lanzar la contra y aguantar hasta la llegada de Correa, que se plantó ante Diogo Costa y batirle de tiro cruzado. El tercero de Rodrigo de Paul encontró a un Oporto ya rendido (minuto 92).

El penalti final anotado por Oliveira no cambiaba el resultado final del Grupo G ni frustraba el pase del Atlético. Al Oporto le queda la Europa League.