Londres, Inglaterra
Desde que ganó el Mundial de 1966, Inglaterra ha visto pasar por delante hasta 29 torneos internacionales entre Eurocopas y Copas del Mundo sin volver a introducir en sus vitrinas título alguno. En total, han pasado casi 58 años desde que Booby Moore levantara al cielo de Wembley el único trofeo del que puede presumir el combinado británico, aquejado de una maldición que campeonato a campeonato ha dejado sin celebraciones a los ‘pross’.
Su paso por las Eurocopas y Mundiales, en total 29, se resumen en 7 ausencias tras fallar en las fases de clasificación, 6 eliminaciones en la fase de grupos, 3 participaciones en los octavos de final, 7 en cuartos, 4 semifinales y 2 finales, la última hace tres años, también en Wembley y que se saldó con derrota contra Italia en la tanda de penaltis. Este domingo, en Berlín, tendrá una oportunidad única para romper su mala suerte, pero para el recuerdo quedarán unos cuantos golpes muy sonados:
Eurocopa de Italia 1968: el gol de Dzajic y la primera expulsión de un jugador inglés
Inglaterra, flamante campeona del mundo, alcanzó la final de la Eurocopa con la base de los jugadores que ganaron un par de años antes. Ahí estaba el portero Gordon Banks, el defensa Bobby Moore, el medio Booby Charlton y el entrenador Alf Ramsey. Yugoslavia fue su rival en semifinales y el Stadio Comunale de Florencia dictó sentencia. Un gol de Dragan Dzajic en el minuto 86 acabó con la resistencia británica y sirvió para inscribir su nombre de los villanos que derrotaron a un equipo que, al borde del pitido final, sufrió su primera expulsión en un gran torneo: ese dudoso honor fue para Allan Mullery.
Mundial México 1970: el ‘Partido del Siglo’ que acabó con la generación dorada
La última aparición de Alf Ramsey y de sus mejores jugadores en un Mundial tuvo un broche de oro pero triste. Los Hurst, Charlton, Moore y compañía dijeron adiós al torneo en cuartos de final en uno de los mejores partidos que sin duda se recuerdan de la Copa del Mundo. Junto a Alemania, honraron al fútbol en el llamado ‘Partido del Siglo’. El conjunto británico, por delante en el marcador gracias a los goles de Martin Peters y Allan Mullery, cedió su ventaja en el último tramo. Franz Beckenbauer y un milagroso Uwe Seller en cabezazo hacia atrás, subieron las tablas al marcador y Gerd Müller, ya en la prórroga, cerró la etapa de una de las hornadas más queridas del fútbol inglés.
Los duros años 70: una década en la sombra
La década de los 70 fue durísima para el fútbol inglés, que curiosamente, a nivel de clubes, sí cosechó éxitos en los años previos a los 80. Liverpool, Nottingham Forest y Aston Villa encadenaron seis copas de Europa entre 1976 y 1982; el Liverpool también sumó dos Copas de la UEFA en 1973 y 1976, como el Tottenham en 1972; y el Manchester City (1970) y el Chelsea (1971) contribuyeron con un par de Recopas. Esas victorias, sin embargo, no se tradujeron en grandes puestas en escena a nivel de selecciones. Todo lo contrario, porque Inglaterra no se clasificó para los Mundiales de Alemania 1974 y Argentina 1978 ni para las Eurocopas de Bélgica 1972 y Yugoslavia 1976.
Se quedó sin plaza en el Mundial de 1974 por culpa de Polonia, contra la que le bastaba una victoria en Wembley para sacar su billete. Antes del choque, el famoso manager inglés Brian Clough llegó a llamar «payaso» a Tomaszewski, el portero polaco que después se convirtió en el héroe de su equipo. Lo paró todo, menos un penalti, Inglaterra no pasó del empate (1-1) y se quedó sin Mundial. En el siguiente, Italia, por la diferencia de goles, dejó sin competición a los ‘pross’, también fuera de las Eurocopas por culpa de un mal partido ante Alemania en la clasificación de 1972 igual que para 1976, solo que Checoslovaquia, posteriormente campeona, fue el verdugo en el último partido.
Mundial España 1982: a un gol de las semifinales
El regreso a las grandes competiciones de Inglaterra dos años antes, en la Eurocopa de Italia 1980, se saldó con una participación que pasó desapercibida. Pero un par de años después, con Kevin Keegan en su última fase, firmó un gran torneo del que se quedó fuera por un gol. En aquella ocasión, la FIFA planteó un sistema con dos fases de grupos. En la primera, Inglaterra hizo pleno de victorias (superó a Francia, Checoslovaquia y Kuwait). En el segundo, se enfrentó a Alemania y a España. Sólo el líder, pasaba a semifinales e Inglaterra empató sin goles ante sus dos rivales. Alemania, con su victoria sobre España (2-1), alcanzó la siguiente fase. Un solo tanto, en cualquiera de los dos partidos, habría bastado al conjunto inglés para colocarse en la orilla de la final.
Eurocopa Francia 1984: El gol de Simonsen y el empate sin goles ante Grecia
De nuevo, otro pinchazo de Inglaterra en una fase de clasificación. En esta ocasión, se quedó fuera de la Eurocopa de 1984 tras ceder ante Dinamarca, que acabó por encima de la clasificación por un punto de diferencia. Lo pudo conseguir de dos maneras y ambas como local: bastaba con una victoria ante la débil Grecia o con un empate contra Dinamarca. No consiguió ni una cosa ni la otra. Ante los primeros, se atascó con un empate sin goles, y ante los segundos, ya con Michael Laudrup y su generación dando sus primeros pasos, cayó con un tanto de penalti de Alan Simonsen.
Mundial México 1986: Maradona explota, Inglaterra pierde
En el Mundial de México 1986, Inglaterra tuvo la mala suerte de encontrarse en los cuartos de final con el mejor Maradona de la historia. Perdió 2-1 y fue eliminado por dos jugadas clave: una, la de la ‘mano de Dios’, en la que el astro argentino batió a Peter Shilton con una de las irregularidades más escandalosas de la historia. Y la otra, con la que Maradona arregló su infracción después de marcar el mejor gol de la historia de los Mundiales. Cosió la pelota a sus pies y desde el centro del campo hasta la portería británica se deshizo de cuanto rival pasó por delante hasta terminar marcar un tanto para la eternidad. Lo sufrió en sus carnes, para su desgracia, Inglaterra.
Mundial Italia 1990: comienza la maldición de los penaltis
Por primera vez desde la Eurocopa de 1968, Inglaterra volvía a las semifinales de un gran campeonato. David Platt, Gary Lineker, Paul Gascoigne y compañía ilusionaron a un país huérfano durante más de dos décadas de alegrías futbolísticas. Después de deshacerse de Bélgica y de Camerún en octavos y en cuartos, respectivamente, Alemania esperaba en semifinales. El partido, intenso e igualado, acabó 1-1 y la lotería de los once metros decidió. Brehme, Matthäus, Riedle y Thon, acertaron para el conjunto germano. Lineker, Beardsley y Platt, para el inglés. Pearce y Waddle fallaron e Inglaterra hizo las maletas.
Mundial Estados Unidos 1994: ‘An impossible job’
Con el buen recuerdo del anterior Mundial, el aficionado inglés estaba ansioso por disputar el de Estados Unidos. Pero antes tenía que clasificarse. Comenzó mal, con un empate en Wembley ante Noruega (1-1) en el que Gascoigne fue protagonista en la previa. No se le ocurrió otra cosa que soltar un ‘Fuck Norway’ que no sentó bien a sus rivales. Además, su entrenador, Graham Taylor, ‘cazó’ a ‘Gazza’ y a Paul Merson bebiendo alcohol antes del choque.
Para la vuelta, después de ceder otros dos puntos con un empate en el último segundo de Holanda (2-2), se jugó todo a una carta de nuevo frente al combinado escandinavo. Y, esta vez, perdió 2-0 para cerrar una fase de clasificación que fue filmada por un equipo de televisión que, con permiso de la FA, grabó todas las intimidades británicas. De ahí salió ‘An Impossible job’, uno de los documentales más famosos de la historia del fútbol y con un título que describió perfectamente lo que ocurrió en esa fase de clasificación.
Eurocopa Inglaterra 1996 y Mundial Francia 1998: otra vez los malditos penaltis
De nuevo, Inglaterra, por culpa de los penaltis, se quedó sin posibilidades de ganar un título. Primero, en su Eurocopa, en la que brilló hasta semifinales, en las que cayó frente a Alemania (otra vez). El fallo de Gareth Southgate en la tanda dejó sin final a los ‘pross’, igual que en el Mundial de 1998. En esa ocasión, fue en octavos, el rival Argentina y después de terminar la prórroga 2-2: Paul Ince y David Batty fallaron sus penaltis y dejaron a su selección de nuevo fuera de una gran competición.
Eurocopa Bélgica y Holanda 2000: la primera victoria de la historia de Rumanía
Inglaterra se enfrentó con optimismo a una competición en la que puso muchas esperanzas. Tenía un grupo difícil, con Rumanía, Alemania y Portugal. Perdió el primer partido ante el conjunto luso (3-2), se recuperó ante el cuadro germano (1-0) y un empate le habría valido ante Rumanía. Sin embargo, cuando el marcador lucía un 2-2 en el minuto 89, otra vez, un penalti, fastidió la fiesta al equipo liderado por Alan Shearer, Michael Owen y David Beckham. Ionel Ganea no falló, Rumanía ganó su primer partido de la historia de una Eurocopa e Inglaterra se fue a la calle.
Eurocopa Portugal 2004 y Mundial Alemania 2006: Portugal y los penaltis acaban con Inglaterra
Con un equipazo en el que lucían nombres como Terry, Beckham, Owen y Lampard, entre muchos otros, Inglaterra se plantó en los cuartos de final de la Eurocopa de 2004 y en los del Mundial 2006. Su rival, en ambos casos, fue Portugal. En el primer ‘tortazo’, era el anfitrión y aunque Inglaterra resistió tras empatar 2-2, con un tanto de Lampard en el minuto 115 de la prórroga, después no pudo con la tanda de penaltis: Beckham y Vassel fallaron e Inglaterra se despidió del torneo, como cuatro años después, cuando tras finalizar el choque sin goles, los errores de Lampard, Gerrard y Carragher, alargaron la maldición británica.
Eurocopas 2008 y 2012: Croacia asalta Wembley e Italia alarga la maldición de los penaltis
Inglaterra, en la fase de clasificación para la Eurocopa de Austria y Suiza 2008, solo necesitaba empatar frente a Croacia en la última jornada para confirmar su presencia en la competición. Sin embargo, sus esperanzas quedaron sepultadas tras caer en Wembley 2-3 ante el combinado balcánico en el que un joven Luka Modric ya apuntaba maneras. Fue una derrota dolorosa y, cuatro años después, aún se extendió esa herida, porque Italia, en cuartos de final, eliminó en los penaltis a los ‘pross’. Young y Cole fallaron y todo se acabó para Inglaterra.
Mundial Rusia 2018: la épica croata expulsa a Inglaterra en semifinales
Ya con Gareth Southgate en el banquillo, Inglaterra, con paso firme, pasó por el Mundial de Rusia partido a partido hasta alcanzar las semifinales ante Croacia. Algunos de los nombres que disputarán la final de la Eurocopa contra España, ya estaban en aquel torneo. Kane, Trippier, Pickford, Walker, Stones y Alexander-Arnold soñaron con una final durante casi 70 minutos, los que disfrutó de una ventaja ajustada por un tanto de Trippier al principio. Sin embargo, Croacia, abonada a las gestas en ese torneo, empató por medio de Perisic y, ya en la prórroga, Mandzukic, hizo añicos el sueño de todo un país, que se quedó a las puertas de repetir la final del Mundial de 1966.
Eurocopa 2020: la derrota más dolorosa de la historia de Inglaterra
Si hay una derrota que ha dolido a Inglaterra, esa es la de la final de la Eurocopa de 2020. Lo tenía todo para ganarla: un equipazo, buenas sensaciones, a su público en el campo apoyando la causa (se disputó en Wembley) y la oportunidad de acabar con la maldición de 54 años de derrotas, sofocos y tristezas. Italia, su rival, teóricamente era la invitada especial a un estadio y alrededores embriagados por el alcohol y la fiesta en las horas previas. Sin embargo, tras terminar el partido y la prórroga con un empate (1-1), los penaltis, esos malditos penaltis que tanto han fastidiado a Inglaterra en esta serie de desdichas, volvieron a jugar una mala pasada a los ‘proos’. Fallaron Saka, Sancho y Rashford e Inglaterra, una vez, la enésima, hincó la rodilla. (Tomado de EFE).