Zidane no quiere fichajes, los jugadores de recambio no revolucionan y las principales figuras como Ronaldo por la calle de la amargura

Honduras

Al Real Madrid nunca se lo da por muerto. Puede tener momentos oscuros como el de ahora y de la nada resurge para ser favorito a cualquier título, menos La Liga, claro esta.

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Pero… ¿Qué necesita para cambiar el tono? Fácil, un rival que de verdad le represente un peligro en todo el sentido de la palabra. Que el Leganés le haya tocado para los cuartos de final de la Copa, es la peor noticia, aunque no pareciera, para este Madrid. Si ganan contundentemente, no pasa nada, el debate sigue. Si ganan con dudas, como lo hicieron contra el Numancia, el entorno se vuelve más grave.

Madrid necesita que febrero llegue ya. Es la única forma. Hay otras opciones pero Zizou no las quiere. Se negó a los fichajes y desde la directiva no se ve movimiento serio para contratar, ni siquiera a un portero promesa o a un delantero consumado de 50 millones de euros para abajo.

Tampoco Lucas Vázquez o Asensio son el cumplimiento de la promesa que se alimentó en la final de la Super Copa. Isco juega bien pero no es suficiente, igual Bale. Y lo de Ronaldo ya ni se comenta. Solo un contricante como PSG, reactiva todo lo que los Merengues representan. Se enciende esa chispa que llegó a ganar 5 títulos el pasado año.

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Ahora, el pensamiento debe ser que si superan al París, volverán a ser la amenaza más considerable en el torneo europeo. Tomarían suficiente gasolina para llegar a la final y ganarla. No hay mejor oportunidad, de lo contrario, el edificio se termina por derrumbar y ni una Copa del Rey salva la temporada. Conociéndose a Florentino, Zidane empaca sus maletas y hasta CR7 se sale del barco.

Toda la temporada se reduce a eso. No al Leganés, no a La Liga. Al PSG.