El Estadio Nacional desde su fundación ha marcado las épocas de mayor esplendor del fútbol hondureño
Tegucigalpa, Honduras
Hace 70 años se inauguró el Estadio Nacional (15 de marzo de 1948), la casa de los equipos Olimpia y Motagua. También lo ha sido de la Selección Nacional, que hace mucho tiempo se mudó para San Pedro Sula.
Tegucigalpa era la única capital centroamericana que no contaba con una instalación deportiva adecuada. En El Salvador ya se había empezado a construir el Flor Blanca; en Costa Rica La Sabana, en Nicaragua el parque de béisbol (bautizado Anastasio Somoza) y Guatemala construía su estadio olímpico para ser escenario de los Juegos Centroamericanos de 1950 (el Mateo Flores).
Entonces, un grupo de entusiastas deportistas presentaron la idea al gobierno del general Carías Andino en 1946 y la iniciativa de ley la introdujo al Congreso Nacional el Ministerio de Educación Pública a cargo del profesor Ángel G. Hernández para emitir el decreto correspondiente y asignarse la partida presupuestaria correspondiente para la construcción del Estadio Nacional.
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Fue construido por el entonces presidente de la República, Tiburcio Carías Andino, con el propósito de promover el deporte entre la juventud que se aglutinaba en otros campos de la capital.
Fue concebido para que en él se jugara al béisbol y al fútbol y se dejó alrededor del engramillado una pista para competencias de atletismo, que sirviera además, para el desarrollo de desfiles cívicos como se ha acostumbrado año con año.
La instalación deportiva ha sido el marco esplendoroso de grandes hazañas de la Liga Nacional, de la Liga de Campeones de la CONCACAF y de eliminatoria mundialista. Su pasto ha visto correr a los mejores jugadores en la historia local. Además fue testigo de la clasificación de Honduras al primer mundial: España 1982.
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A lo largo de los 53 años de la historia de la Liga Nacional son muchos los clubes que han adoptado esta cancha para sus juegos de local. Olimpia, Motagua, Federal, Troya, Atlético Indio, Atlético Español, Curacao, Tiburones de San Lorenzo, Campamento, Valencia, Necaxa y UPNFM de primera división.
Además, por su capacidad, se ha utilizado como escenario de las tomas de posesión presidenciales, eventos religiosos y musicales. Según está establecido en las leyes de Honduras, y considerando que la instalación pertenece al Estado –administrado por la CONAPID– a partir del regreso democrático al país, las tomas de posesión se hacen en esta instalación deportiva, cada 27 de enero de cada cuatro años.
El Estadio Nacional está localizado en el barrio Morazán, al pie del cerro Juana Laínez. Tiene capacidad para 37 mil aficionados, inicialmente tenía un aforo de 25 mil personas. Cuenta con una estructura circular, la cual se divide en cuatro localidades: sector popular (sol), preferencial (sombra), silla y los sectores de palcos.
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La instalación deportiva se inauguró el 15 de marzo de 1948 con una doble y atractiva jornada. Por la mañana se jugó un partido de béisbol entre las selecciones de Honduras y Cuba (3-10). Por la tarde un encuentro de fútbol con una cuadrangular que involucró a Guatemala, Costa Rica, Panamá y Honduras, conmemorando la semana del deportista hondureño.
En el Estadio Nacional se logró la clasificación a una primera copa del mundo. Además se ha clasificado a mundiales juveniles Sub-20 y Sub-17.
El momento más emotivo se vive en noviembre de 1981 cuando la Selección de Honduras de la mano de Chelato Uclés clasifica al Mundial de España 82. La bicolor ganó invicta la hexagonal venciendo 4-0 a Haití, 2- 0 a Cuba, 2-1 a Canadá. Solo empató 0-0 con El Salvador y México.