La cantante Rihanna insultó y tuvo malos gestos hacia la estrella de los Warriors, Kevin Durant, y como fiel seguidora de LeBron James le rindió pleitesía

Estados Unidos

Rihanna se ha convertido en una de las protagonistas de la final de la NBA. Durante el primer partido al mejor de siete entre Golden State Warriors y Cleveland Cavaliers, la cantante, originaria de Barbados, se ha picado con la estrella de los locales, Kevin Durant hasta el punto, que el propio jugador le ha respondido en pleno partido.

La historia comenzó cuando Rihanna se levantó de su asiento a pie de pista para, tras una buena jugada de LeBron James, hacer una reverencia a la estrella de los Cavaliers. Lo ha hecho casi metiéndose dentro de la cancha. El gesto ha sido visible para los jugadores y también para el público, que se lo ha recriminado. El duelo se jugaba en casa de los Warriors.

Protagonizó un segundo episodio. Hizo estallar los ánimos de todo el pabellón. Durante unos lanzamientos de tiros libres de Kevin Durant (que fue el máximo anotador del encuentro con 38 puntos).  La cantante ha insultado a Durant gritando apenas a unos metros de la estrella un sonoro «Briiiiick!».

Brick (ladrillo) es lo que se suele decir cuando un lanzamiento es, lo que en español diríamos, una pedrada. Nada más anotar ese tiro libre, Kevin Durant se ha quedado mirando, retador, a Rihanna, a la que luego, tras anotar un triple, le ha dedicado la canasta mirándola apenas a un metro de distancia.

Terminado el partido, Rihanna, fiel seguidora de LeBron James, ha avivado el fuego. «No pasa nada. Puta. LeBron sigue siendo el rey», ha dicho. Luego, en sala de prensa, Durant ha sido preguntado por este asunto y el jugador ha regateado el asunto, primero, con un «no recuerdo nada» y luego con un «sólo quise pasarlo bien» cuando se le ha insistido al respecto.