El presidente de la Federación Italiana de Fútbol confía en que los equipos puedan volver a entrenar el 4 de mayo, eso sí siempre «con la debida cautela y garantías»
Roma, Italia
El fútbol italiano comienza a ver la luz al final del túnel. Gabriele Gravina, presidente de la Federación Italiana de Fútbol, ha asegurado que confía en que los equipos puedan volver a los entrenamientos a partir del 4 de mayo.
Además, reconoce que la intención de la federación es que se puedan volver a ver partidos de la Serie A «entre finales de mayo y principios de junio», siempre con la debida cautela y garantías.
«Espero que cada equipo pueda jugar en su propio estadio. Si nos proyectamos a largo plazo, me gustaría darles a los italianos la esperanza de que entre finales de mayo y principios de junio pueda ser posible jugar también en los estadios del norte de Italia», comentó.
Vea además: Periodista Alex Blanco de Fox Sport anuncia que superó el coronavirus
Además, explicó que ya han trasladado sus planes al ministro de Deportes, Vincenzo Spadafora, y al de Salud, Roberto Speranza. «Comparto la esperanza de Spadafora de poder reiniciar los entrenamientos el 4 de mayo, con la debida cautela y garantías. Vamos a enviar nuestro protocolo al gobierno», indicó.
Ese protocolo ha sido elaborado por un comité técnico-científico. «Habrá un período de control para garantizar los negativos de todos los que participen en los partidos. Si todos dan negativo, no hay problema de distanciamiento o contagio», apuntó, antes de hablar de las semifinales de la Copa de Italia.
«Estamos esperando el calendario. Espero que todos puedan jugar en su propio estadio, y si no es posible, encontraremos soluciones alternativas», subrayó.
Le interesa también: Borussia Dortmund devolverá el dinero de las entradas y abonos a sus aficionados
Gravina aseguró que es «un momento complejo para Italia, para la economía y para el fútbol. Con sentido de responsabilidad, disponibilidad y sentido común, encontraremos el camino correcto. Quien llame a la cancelación de la temporada no ama al fútbol ni a los italianos y quita la esperanza en el futuro», advirtió.
Por último, el máximo mandatario de la FIGC anunció que habrá partidos benéficos de las selecciones masculina y femenina en Bérgamo, uno de los epicentros de la pandemia de coronavirus en el país, y que esperan que Milán, otra de las ciudades más afectadas, acoja el primer partido con público de la Azzurra.
«Esperamos, asumiendo el compromiso junto con el seleccionador Roberto Mancini, poder jugar en Milán el primer partido de nuestra selección a puertas abiertas», concluyó.