El equipo dirigido por Zinedine Zidane busca revertir el 2-1 adverso sufrido en el Santiago Bernabéu
Londres, Inglaterra
Será el espectáculo más atractivo de la jornada. Un nuevo duelo de estilos que enfrentará al pragmatismo del Real Madrid contra la estética del Manchester City en el Reino Unido. Será la revancha de los octavos de final de la Champions League, luego del triunfo del equipo inglés en el Santiago Bernabéu por 2 a 1.
Los blancos liderados por Zinedine Zidane tratarán de invocar una mágica noche europea para remontar el resultado adverso que sufrió en la capital ibérica en febrero, cuando el combinado de Pep Guardiola impuso su jerarquía.
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Sin embargo, las realidades son muy distintas de los equipos luego de la extensa suspensión preventiva en medio de la pandemia: Real Madrid se reactivó al arrebatarle el título de La Liga al Barcelona, mientras que Manchester City sufrió una inestabilidad inesperada en los torneos doméstico, ya que su única alegría se amparó en la obtención de la Carabao Cup.
Las diez victorias consecutivas y las garantías defensivas ofrecidas en la vuelta a la competición han reforzado la confianza en el entorno madridista. Sin embargo, tiene ante sí un reto supremo y casi desconocido, dado que sólo en una de las seis ocasiones en las que perdió la ida de local en el certamen internacional, pudo revertir la historia (en la Recopa 70-71 ante el Wacker austriaco). Además, Zidane sólo ha tenido que hacer una remontada como entrenador, pero fue en España y ante el Wolfsburgo.
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La tarea no parece sencilla, aunque el Manchester City haya sido arrollado en la Premier por el Liverpool y eliminado por el Arsenal en las semifinales de la FA Cup. El equipo inglés se ve muy fortalecido, pero su mayor enemigo puede ser el vértigo que ha tenido en los últimos años en los cruces. Incluso con Guardiola no ha podido pasar más allá de los cuartos de final, pese a ser considerado siempre un claro aspirante al título.
De todos modos, el técnico catalán demostró tener bien aprendida la lección en el partido de ida, donde, sin perder muchas de las señas de identidad de su filosofía, arriesgó mucho menos de lo que acostumbra. Así sacó un valioso triunfo que le permitirá plantear la revancha con más alternativas que el francés, quien seguramente ordenará salir a intentar adueñarse del pleito.