Bastian Schweinsteiger protagonizó uno de los episodios que más noticia generó en la primera mitad de la temporada. El legendario internacional alemán, -excapitán del Bayern de Múnich y entonces en el Manchester United-, dejó de ser tomado en cuenta en el club inglés al mando del técnico José Mourinho.

El centrocampista teutón no sólo no jugó con el conjunto “Red Devil”, sino que tampoco pudo entrenarse con ellos. Sin embargo, jamás alzó la voz, y hoy se ha conocido por qué.

Tal y como desvela “Football Leaks”, el United puso en el contrato del futbolista germano una cláusula del silencio, según la cual cada vez que hablara mal de su entrenador sería penalizado con dos semanas de su sueldo. Así pues, a Schweinsteiger no le quedaba otra que callar.

Pero se cansó. Sin estridencias ni salidas de tono, el que fuera internacional por Alemania pidió salir rumbo a Estados Unidos y así poner fin a su estancia en Old Trafford. Actualmente en el Chicago Fire norteamericano, Schweinsteiger vuelve a disfrutar del deporte rey.