75 millones por James Rodríguez. El Real Madrid no piensa regalar al colombiano y pretende recuperar el dinero que tuvo que pagar por el pase del mediapunta en el verano de 2014. El ex del Mónaco se despidió en la tarde del domingo del Bernabéu y lo hizo sabiendo que el del Sevilla había sido su último partido en el estadio madridista con la blanca camiseta del Real Madrid.
James Rodríguez ha intentado dar la vuelta a una situación complicada desde el mes de julio de 2015, momento en el que Rafa Benítez le pidió que regresare antes de vacaciones. El colombiano no creyó conveniente ese adelanto tras haber vivido Mundial y Copa América en los últimos veranos y todo cambió. La titularidad que había logrado con Ancelotti, pasó a mejor vida y ya no volvió a tener la etiqueta de indiscutible que tuvo con el italiano.
Desde el pasado mes de enero, y tras un amago tras el Mundial de clubes de Yokohama, James quiso revertir una situación que parecía no tener solución. La mejora en su actitud, le llevó a ser parte activa en el plan B de Zidane, pero sin presencia en los partidos decisivos, circunstancia que ha llevado al colombiano a pedir a Jorge Mendes, agente y persona de confianza, que busque otro destino tras comprobar que su estancia en el Real Madrid le aleja de la felicidad deportiva por culpa de su condición de discutible en el once titular.
El pasado mes de enero estuvo a un paso de firmar por el Chelsea. El equipo que ha resultado campeón de la Premier League traspasó a Óscar al fútbol chino y se interesó por el colombiano, que tras comprobar que se quedaba fuera de la final de clubes se lo pensó, pero finalmente se concedió una nueva oportunidad en el club blanco.
Ahora en Colombia afirman que su destino es el Manchester United, bien a cambio de un traspaso, el Real Madrid va a pedir 75 millones por la operación, o bien como moneda de cambio de la posible llegada de David de Gea a la entidad madridista. El Chelsea no ha renunciado al mediapunta y espera al desenlace final de la temporada para pasar al ataque y hacer llegar al Bernabéu una propuesta de traspaso.
James ha sido fundamental en el tramo final de la temporada dentro de esa segunda línea que Zidane ha puesto en funcionamiento primero en la Copa del Rey y después en seis partidos de Liga, empezando por el disputado en Eibar.
El colombiano ha marcado y ha sido decisivo, pero su ausencia en los partidos clave, le han hecho ver que debe buscar destino. Eso sí, ya sabe que su libertad cuesta 75 millones de euros. Y es que por la zona noble del Bernabéu no consideran que James ha perdido valor. Mantienen que su salida es por algo circunstancial como es que un técnico se incline por uno u otro jugador y no porque el colombiano no rinda como es debido.