La denuncia de la fiscalía, indica que Cristiano  utilizó «una estructura societaria creada en 2010 para ocultar las rentas generadas en España por los derechos de imagen. Algo que supone un incumplimiento voluntario y consciente de sus obligaciones fiscales en España».

Ronaldo dijo tener la «conciencia tranquila».  Pero según la prensa deportiva, quiere marcharse del club merengue porque siente que lo tratan «como a un delincuente», pese a los muchos títulos ganados desde su llegada en 2009, entre ellos tres Ligas de Campeones.

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El propio presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, reconoció que el jugador está «herido» por la investigación.

Actualmente, Ronaldo se encuentra en Rusia disputando con la selección portuguesa en la Copa Confederaciones, que concluye el 2 de julio, y no ha dicho nada sobre su futuro en el Real Madrid.

Un año después de la condena del delantero argentino del FC Barcelona Lionel Messi por fraude fiscal, la justicia española parece haber lanzado una ofensiva para combatir este tipo de delitos en el mundo del fútbol.

El Real Madrid ha recomendado al futbolista que pacte con la Fiscalía y se declare culpable para evitar ir a juicio y arriesgarse a penas más severas. Una idea que no agrada a CR7, deseoso de demostrar su inocencia.