Messi envió un mensaje a un diseñador de zapatos para que su esposa cumpliera el sueño de tener su negocio
España.
Como tantas otras relaciones, la historia de cómo Ricky Sarkany se asoció con Antonela Roccuzzo y Sofía Balbi -las mujeres de las estrellas del Barcelona: Leo Messi y Luis Suárez-, empieza en Instagram.
El 25 de julio del año pasado el zapatero subió una foto a Instagram y un par de horas más tarde recibió un mensaje a su celular, de un número desconocido. Que decía ser Messi.
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«Hola Ricky, ¿cómo andás? Perdona que te escriba así de la nada. Soy Leo. Cuando puedas me gustaría llamarte para comentarte una cosa. Capaz es una locura, pero como sabés a mi mujer le encantan tus zapatos y a la mujer de Suárez, también. Queríamos ver la posibilidad de hacer algo acá en Barcelona. Por eso me gustaría hablarte. Abrazo grande».
Ricky Sarkany recibió ese mensaje de Whatsapp y contestó sin dudar. «Estoy manejando», respondió pensando que se trataba de una broma. Sin embargo, quien le escribió era efectivamente Lionel Messi.
El propio Sarkany lo confirmó a Infobae. «Pensé que eran dos chicos aburridos. Me imaginé a dos adolescentes grabando mi respuesta y compartiéndola un millón de veces», pensó el empresario.
Finalmente una videollamada confirmó la veracidad del mensaje. Esa curiosa anécdota fue el comienzo de una relación comercial que permitió que Antonela Roccuzzo y Sofía Balbi (la mujer de Luis Suárez) obtuvieran el permiso del diseñador para abrir un local de su marca en Barcelona.
De ese mensaje en Whatsapp que Sarkany dio a conocer nació la alianza de la familia Messi y Suárez con Sarkany. Luego, esa amistad hizo que en mayo de este año se inaugurara en Barcelona el primer local de la prestigiosa marca de zapatos, en una de las zonas comerciales más exclusivas.
Sofía y Antonella seleccionan, junto a Sarkany, la colección que quieren vender en Europa. Guían con su gusto y el de su público lo que quieren vender en Barcelona.
Tomado de: Infobae
