La eliminación al Mundial es como el principio del fin para el fútbol de Estados Unidos, aseguró el expresidente de Concacaf

Trinidad y Tobago

Jack Warner, el cuestionado dirigente, exvicepresidente de FIFA, expulsado del fútbol por corrupción, está feliz con la eliminación de Estados Unidos al Mundial de Rusia 2018 ante la selección de su país, en Puerto España.

El que ríe de último, ríe mejor… Así lo entiende el exdirigente que «quería ser parte de esa fiesta», dijo en una entrevista a una estación de radio en Trinidad y Tobago.

«Nunca he estado tan alegre y este es el día más feliz de mi vida», añadió el triniteco acusado de fraude telefónico, chantaje y lavado de dinero en un escándalo ventilado en los tribunales de Estados Unidos, que provocó cambios en la FIFA y su expulsión del organismo en septiembre de 2015.

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Warner aseguró sentirse vengado cuando Trinidad y Tobago venció 2-1 a Estados Unidos en el cierre de la hexagonal de Concacaf. Resultado que dejó al equipo de Bruce Arena sin Mundial luego de los triunfos de Panamá y Honduras.

El exfuncionario señaló que los estadounidenses «redujeron el fútbol en la Concacaf a una pesadilla, que han utilizado a su gobierno para ayudar a desmembrar a la FIFA de una manera inimaginable y en el campo de juego Trinidad y Tobago los puso de rodillas».

«Personalmente, Estados Unidos se ha convertido en un hazmerreír. En lo que a mí respecta, este es el comienzo del fin del fútbol estadounidense. A nadie en Concacaf le gusta Estados Unidos», declaró.

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Warner dijo que sabía que hubo una celebración en Estados Unidos después de que fuera suspendido del deporte. Por esta razón hoy se complace en ver el fracaso decepcionante de la selección norteamericana. Los estadounidenses se perderán su primera Copa Mundial desde 1986.

«Quería salir y festejar como festejaron ellos en septiembre pasado cuando un juez falló en mi contra. Yo quería ir de fiesta», subrayó el otrora dirigente de Concacaf.