Coutinho sigue siendo prioridad, pero el alemán toma fuerza
Barcelona, España
Mesut Özil (Gelsenkirchen, 15-10-88) sube como la espuma en las quinielas de Can Barça para ser el fichaje de invierno. Josep Maria Bartomeu ya admite abiertamente que, para ganar la Champions, tendrán que dar «un retoque» en enero. El fichaje, pues, parece inminente. Y aunque el plan A sigue siendo Philippe Coutinho, en las oficinas del club azulgrana saben dos cosas: la primera es que el brasileño ya no podría jugar la Champions. La segunda, que el Liverpool volvería a poner piedras en el camino del club azulgrana y el fichaje podría encallarse como en verano, cuando pese que el mismo Coutinho pidió el transfer request, los reds no se movieron de su posición y el fichaje se acabó frustrando.
El Barça no quiere quedarse colgado como entonces y Özil es una opción que seduce. El Arsenal podría dejarlo salir por 20 millones de euros, según informa este martes Mundo Deportivo.
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Özil ya estuvo cerca de convertirse en jugador del Barça en el verano de 2010. Por entonces, su representante era Pere Guardiola, hermano del entonces técnico azulgrana. Se especuló con que Guardiola no quiso implicarse en el fichaje por temor a que se le implicase en los negocios de su hermano aunque a principios de 2017 fue el mismo Özil quien aseguró que nunca recibió una llamada de Guardiola y que su desinterés, mezclado con los cariños de Mourinho, hicieron que se deshiciese por el Madrid. Özil jugó, por cierto, grandes partidos con la camiseta del Madrid en el Camp Nou. Ahora parece más cerca que nunca del Barça. Jugador de talento, es capaz de abrir defensas con su capacidad de asociación, pero también le gusta lanzar contragolpes por su facilidad de conducción y una más que aceptable zancada. Pese a su aparente zancada cansina, es capaz de avanzar mucho y muy rápido con el balón cosido al pie.
Özil, pues, sube como la espuma por más que el secretario técnico del Barça, Robert, siga considerando a Philippe Coutinho, por edad, fútbol y proyección, una prioridad. Özil, que firmó un contrato de cinco años con el Arsenal en 2013, finaliza su compromiso el próximo mes de junio. El precio no sería un problema. Sí, tal vez, las condiciones de contratación, ya que el alemán pedirá el correspondiente bonus de fichaje como si terminase contrato. Es ahí donde el Barça, que tiene en Di María una tercera vía pendiente, tendría que hacer cuentas.
