El Atlético de Madrid venció a la Roma para mantener viva la ilusión de clasificar a los octavos de final
Madrid, España
Hace mucho que el Atlético de Madrid no se encontraba en una situación así. Dependiendo de otros y aferrándose a toda mínima posibilidad de clasificación. Sus esperanzas están puestas en el Qarabag, siempre y cuando ganen al Chelsea en Stanford Bridge, empresa complicada en demasía.
Pero la actuación de esta noche en el Wanda Metropolitano servirá para algo más que mantener viva la vela de la esperanza. El gol de Griezmann invita a pensar que los colchoneros tienen calidad suficiente para salvar la temporada, ya sea en Europa League, Copa de Rey o en un milagroso pase a octavos y un inesperado ascenso en La Liga.
Se cumplía el minuto 68, y el incómodo 0 a 0 presionaba el silencio de los aficionados. Bastó un toque preciso de Fernando Torres y la velocidad necesaria de Correa para alcanzar la pelota y que Antoine Griezmann hiciera lo mágico. Pirueta, tijereta o chilena. Como se quiera llamar. Golazo y golazo para inyectar de moral una apesadumbrada temporada.
Se disipan las dudas del francés con el equipo, no solo la de su continuidad sino, las que envolvía los argumentos de porqué debería seguir en el Club. Los últimos partidos, el Cholo optaba por cambiarlo en los intervalos finales, hoy le tuvo confianza y reaccionó con creces.
Kevin Gameiro puso el 2 a 0 y la tranquilidad de verse ganadores. El Atlético del Cholo aún no muere, no mientras hayan partidos como el de hoy.