Si no es Diego Vázquez el próximo técnico de la Selección, al menos que sea alguien de su pérfil

Honduras

Algo tienen los técnicos rioplatenses. Algo hacen que los hondureños, colombianos y hasta europeos no hacen. ¿Por qué Real España fracasó con Primi y ahora, de la nada, vuelve a soñar con Martín García? ¿Por qué Motagua no creció con Vidakovic y sí con Vázquez? ¿Por qué Marathón se fue en blanco con técnicos como Pavón o Ríos y ganó la Copa Presidente con Keosseián y es primero con Vargas?

Los entrenadores argentinos y uruguayos han revolucionado la Liga Nacional. Los jugadores tienen más confianza y entendimiento con ellos. Ha sido tanto el impacto que bajaron del púlpito al Olimpia, que estaba en lo mejor con Vargas, quien denunció hace poco que los directivos no lo estaban apoyando, es decir, la relación se desgastó pero funcionó para tres copas. Y si Los Leones dejaron de ganar, también fue porque el Motagua, de otro argentino, Diego Vázquez, vino en alza.

Además Vázquez y Vargas tienen el gran mérito de devolverle el sabor a los clásicos. Quizá con Restrepo se hicieron un poco insípidos, pero todavía quedan indicios de esa rivalidad en los jugadores. La afición se concentró de nuevo en esos partidos que antes, habían caído en un terrible agujero, eran de 0 a 0 y para dormirse. Hoy son diferentes, y esa misma sensación se trasladó al clásico de las M´s.

Marathón tuvo alma de nuevo con Keosseián, vieja fórmula pero efectiva. No les alcanzó para la Liga pero sí para una Copa Presidente que Real España y Motagua aún no ganan. Después, Vargas tomó las riendas, armó un poco más al equipo, y avada kadabra, esta en primero y como favorito al título.

También parece mágico lo de Martín «Tato» García. Real España con Ramón Primitivo Maradiaga era un equipo interesante pero hasta allí. Al segundo tiempo los rivales le encontraban la vuelta y le remontaban. La prensa se fue con todo contra directivos y jugadores cuando el Primi, victimizándose en conferencia, dijo que «el equipo no tenía alma y que no lo podía dirigir por eso». Solo cinco partidos ha dirigido García y el España se mostró más esplendoroso que nunca. Si no tenía alma, ¿que es lo que Tato les inyectó?, algunos dirán magia, la magia de los entrenadores sudamericanos.

Lo de los colombianos tal vez ya se gastó, así como la alianza Vargas-Olimpia. Puede que entrenadores como Pinto y Restrepo sean más tácticos y estratégicos, elementos esenciales, pero los argentinos Héctor Vargas, Diego Vázquez y el uruguayo Martín García, aplican otra característica que es la que cala y necesita más el jugador hondureño, la motivación. Esa euforia de García al celebrar un gol, esa emotividad exacerbada de Vargas a la hora de declarar, y que por eso, mejor utiliza a Pineda para que hable por él como Karanka hablaba por Mourinho, y esa picardía de Vázquez, muy criticada pero que es parte de una mentalidad ganadora que los tres técnicos saben implementar en los jugadores.

Por lo tanto, si la Fenafuth no contratará a Diego Vázquez, que es lo más probable, que busque un seleccionador de esas características porque a la Selección le faltó compromiso y vértigo. Y se evitarán los conflictos entre futbolistas y entrenador, situación que no sucede con Vázquez y rara vez sucedió con Vargas, y sí sucede con Restrepo quien no parece tener control con jugadores como Kevin Álvarez. Y también pasó con Pinto, como todos ya saben.

Con todo el respeto que se merece Carlos Restrepo,  no creo que el próximo monarca sea blanco. Esta Liga es de los rioplatenses, Marathón, Real España o Motagua, me atrevo a decir que uno de ellos levantará la Copa.