Jorge Luis Pinto anunció su salida oficial de la Selección como el principal villano de la eliminación
Honduras
Jorge Luis Pinto, en conferencia de prensa, anunció su salida para la gran alegría de sus detractores, quienes temieron en los pasados meses, una urdimbre en el seno de la Fenafuth para renovarlo.
Sorprende como la mayor parte de la prensa deportiva ponde sobre la figura de Pinto toda la responsabilidad de la eliminación. Claramente tomó malas decisiones, pero es difícil achacarle tal culpa sin examinar el estado del fútbol actual en Honduras.
Decir que por Pinto no se fue a Rusia es un argumento simplista. La línea de 5 no nos dejó al margen del Mundial. Rápido se olvida que los encargados del balompie nacional en sus mejores años, poco hicieron para fortalecer cimientos porque estaban muy ocupados enriqueciéndose del deporte, y hoy sabemos que algunos lo hicieron de forma ilegal.
El fútbol de Honduras es improvisado, es a lo que salga. Se deja todo al famoso talento del futbolista hondureño y muy poco al trabajo. Pinto, si algo aportó fue eso, trabajo, duro y exigente. Tanto que tocó el ego de los que se creían intocables. Los que abandonaron el barco sin aceptar el reto de las fuertes mareas y terminaron ahogándose en una serie de críticas que poco o nada aportaba al bien de la Bicolor, todo lo contrario, empeoraba la tensión.
Pinto colisionó con la cultura parsimoniosa de los jugadores, con la carencia de procesos y con muchos periodistas que descargaron contra él, toda la furia que debieron haber lanzado a los responsables del atraso en el fútbol catracho.
Descuido en las Ligas menores, infraestructura penosa y una Liga Nacional que tiene que pedir ayuda a terceros para comenzar el torneo. Son algunos de los incontables problemas que tiene Honduras en materia futbolística.
Hoy más que nunca vale la frase que los que juegan son los jugadores. Pinto trató y hasta logró ciertas cosas (Cuarto lugar Juegos Olímpicos y Campeón de Centroamérica), no fue del todo malo esta era que no se extrañará pero debería para que nos examinemos más en lugar de señalar a un hombre que consiguió con una cultura muy superior a la nuestra, llegar a los cuartos de final del Mundial.