En un partido de mucho sacrificio el Real Madrid sacó el resultado e inclina la eliminatoria

 

Munich, Alemania

Otro partido que el Real Madrid gana en la Champions, torneo donde no parece tener rival. Derrotó, en sus canchas, al campeón de Francia, al de Italia y ahora al de Alemania. La era de Zizou no conocer la eliminación en dicha competencia y esa ‘condenado’ a jugar su tercera final.

Fue accidentado el inicio de partido para el Munich. Pese a tener la primera clara, en la que Lewandowsky apenas pudo centrar para el mal remate de Mueller. La situación se puso cuesta arriba cuando Robben y Boateng pidieron el cambio por lesión, dos nuevas bajas que se unen a las de Vidal, Alaba y Neuer.

Las salidas de dos figuras de manera temprana, dejó tocado al equipo bávaro. Fue cuando el Real Madrid presionó. Hasta en tres jugadas estuvieron cerca de anotar, el gol estaba caliente, pero descuidaron las salidas, James encontró claridad, habilitó a Kimmich que en lugar de centrar disparó al marco para el primero del juego.

El gol animó a los locales, ahora eran ellos los que atacaban frenéticamente. Justo en ese intervalo Marcelo tomó una pelota en los linderos del área y latigó para el empate. De nuevo el Madrid anotaba sin hacer mucho. Siempre se siente comodo aunque la pase mal en el terreno.

Ya en el complemento, el partido se desarrolló con la tensión de dos equipos que no regalaban nada, excepto por el error de Alcantara, que permitó un contra golpe fulminante del Madrid, armado por Vázquez y terminado por Asensio que remató magistralmente para el 2-1.

Los bávaros lucharon, dominaron, llegaron pero en cada oportunidad fracasaban. Keylor Navas tapó en cuatro oportunidades, en otra noche memorable para el tico. En los últimos minutos las piernas ya no daban, y gracias a eso, el Madrid amarraba prácticamente la ventaja. El equipo de Zidane supo jugar mejor el encuentro y ahora esta con un paso en Kiev.

Simplemente imparables.