Croacia intentará vengar la generación del 98 que fue eliminada por Francia en semifinales
Moscú, Rusia
Los goles tempraneros cambian el guion pero no deben alterar el orden. A los tres minutos Trippier la mandó al ángulo de tiro libre, recordando los tiros de David Beckham, que por cierto, Trippier intenta imitar desde la óptica de los vídeos en youtube.
A los 5 minutos el gol y se podía pensar en un duelo abierto pero no. Parejo encuentro que solo el tanto de Trippier hacía la diferencia. Croacia se desordenó. Sufrió más de la cuenta después del gol y tuvo que esperar hasta el minuto 18 para tener la primera oportunidad, un tiro raso de Perisic que se fue cerca.
De no ser por Subasic, el partido se definía en la primera parte. El arquero resolvió un mano a mano con Kane, el resto, fue solventado por el palo en el contra remate del ‘Huracán’.
Modric aparecía pero lo limitaban sus marcadores. De igual forma Rakitic, que se fue de varios rivales al final de los primeros 45, pero no pudo sacar el remate.
El complemento era dominado por Croacia, similar a los minutos que tuvo Bélgica el día anterior, solamente necesitaba hacer un poco más, el gol, nada más y nada menos.
Al 68, llegó el centro ideal para Perisic, quien saltó para alcanzar con el pie, el esférico, antes de que el defensor inglés con la cabeza. Empate de puro corazón para los pupilos de Dalic.
Tiempo final y de nuevo a 30 minutos más, sumados, hacían que Croacia jugará un partido más cronológicamente, un desgaste que no se reflejaba, lo contrario, era Inglaterra el que denotaba mayor cansancio.
Otro tiempo extra no siempre significa otra tanda de penales. Al minuto 118, un cabezazo en forma de pase, sorprendió a la zaga inglesa, Mandzukic entró solo y remató cruzado. Croacia estaba gestando la remontada.
Inglaterra no tuvo argumentos más que el corazón, pero era más grande el corazón croata, que ahora irán por la venganza de la generación del 98. Un país de 4 millones de habitantes sorprende al mundo.