En una actuación apenas discreta de Barcelona, el conjunto que capitanea Lionel Messi se terminó imponiendo 1-0 ante Valladolid en un final polémico: en el minuto 93, el árbitro Mateu Lahoz, a instancias del VAR, le anuló un gol al local por offside que generó las protestas de toda la afición presente en el estadio José Zorrilla.

En los últimos tramos del encuentro, Valladolid logró empujar al Barça contra el arco de Ter Stegen. En ese contexto, llegó el centro para Keko, quien conectó para desatar la locura entre los fanáticos de su equipo y el propio plantel: era el 1-1 contra el poderoso, el último campeón. Sin embargo, inmediatamente, los futbolistas del blaugrana (especialmente Piqué) rodearon al juez para advertirle que el asistente De Burgos Bengoetxea había levantado su banderín.

En consecuencia, Mateu Lahoz consultó al VAR, herramienta que está haciendo su presentación en la presente edición de la Liga de España. A través de la Asistencia Arbitral por Video, la autoridad del encuentro confirmó que Keko estaba adelantado por centímetros y anuló el gol, para alivio del elenco de Ernesto Valverde, que así se aseguró la segunda victoria en la misma cantidad de encuentros en el certamen local.

Tras el suspenso mientras el árbitro consultaba al VAR, en las gradas y en el banco de suplentes de Valladolid reaccionaron con bronca y fastidio ante la noticia de que el tanto del empate fue anulado. Y el Barcelona salvó el triunfo.