El brasileño llegó al PSG como el fichaje más caro de la historia para buscar protagonismo que lo acercara a Messi y Cristiano, sin embargo Mbappé empezó a eclipsarlo

París, Francia

Neymar Jr. se marchó del FC Barcelona porque no quería estar a la sombre del crack argentino Lionel Messi. Fichó por el París Saint-Germain por una cifra récord de 222 millones de euros, convirtiéndolo en la contratación más cara de la historia.

El brasileño llegó a París para brillar con luz propia y escribir una historia que lo acercara a las estrellas Messi o Cristiano Ronaldo, últimos ganadores del Balón de Oro.

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Pero su camino ha sido espinoso. Primero tuvo que «pelear» con el uruguayo Edinson Cavani, referente del ataque y lanzador de los penales y tiros libres del equipo. Además, su contratación coincidió con la llegada del francés Kylian Mbappé.

Neymar cumplía una campaña destacada en el equipo parisino, pero se lesionó. Incluso, se especuló su ausencia en el Mundial de Rusia. Pese a la inactividad, terminó la temporada en la Liga 1 de Francia con 28 goles, por 21 de Mbappé, quien llegó procedente del Mónaco.

El Mundial de Rusia resultó el detonante para Mbappé, que deslumbró al mundo con su potencia de piernas, velocidad y calidad al marcar cuatro anotaciones y a los 19 años convertirse en Campeón del Mundo, con lo que en su regreso al PSG ya se le ve distinto en relación con su primera temporada en el club.

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En el último partido Mbappé marcó cuatro goles en 13 minutos al Lyon para establecer una marca y volvió a convertirse en el centro de elogios y felicitaciones. De hecho, circuló una fotografía en la que ‘Ney’ se ve relegado a un segundo plano, mientras el francés es cargado y abrazado por sus compañeros del PSG.

En varias ocasiones Neymar dijo públicamente que quería jugar un rol «protector» con Mbappé, algo similar a lo que hizo Messi con él en el Barça; sin embargo, es un hecho que el joven francés ya se hizo adulto y empezó a robarle protagonismo en el PSG al fichaje más caro de la historia.