Los clubes de la MLS, Inter Miami y Atlanta United se sumaron a las protestas por el ataque policial contra el afroamericano Jocob Blake el domingo en Kenosha, Wisconsin

Estados Unidos

El futbol se detuvo en Estados Unidos y esta vez no fue por el coronavirus, fue en solidaridad con las protestas por los actos racistas, donde de nueva cuenta se suscitó un problema entre policías y una persona afroamericana de nombre Jacob Blake a la que le dispararon en la espalda.

El juego que puso el ejemplo fue el del Inter Miami y Atlanta United, donde tras un retraso de casi media hora y una plática entre capitanes y árbitros, se decidió que no se jugaría el partido, siguiendo lo que ocurrió en la NBA horas antes.

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Los árbitros dieron aviso al resto de los jugadores, entre los que estaban los mexicanos Rodolfo Pizarro, Jürgen Damm y Erick «Cubo» Torres. Solo se tomaron una fotografía como parte de la protesta con las playeras que lucían la leyenda Black Lives Matter (Las vidas de la gente de raza negra importan).

Acto seguido, los juegos del San José Earthquakes vs. Portland Timbers y LAFC vs. Real Salt Lake también fueron suspendidos en apoyo a la causa de Jacob Blake, previa postura oficial de la MLS respaldando cualquier clase de protesta o decisión de los futbolistas.