El ex campeón mundial de los pesos pesados que hoy encabeza un emprendimiento de cultivo de cannabis fue adicto al alcohol y a la cocaína
Estados Unidos
La vida de Mike Tyson ha tenido varios altibajos. De maravillar al mundo con sus puños a finales de la década del 80, en los 90 pasó a ser una celebridad en decadencia con episodios escandalosos y hasta un paso por la cárcel. Pero en los últimos años se ha recuperado de sus problemas y su podcast suele repasar alguno de sus momentos más polémicos.
En varias oportunidades, el ex boxeador ha afirmado que la única droga que consume es la marihuana y que cualquier tipo de estupefaciente es parte de su pasado. Así, y gracias a una estricta dieta, se lo ha visto en gran forma física y mental, a tal punto que en 2020 volvió a subirse al cuadrilátero para medirse en un combate de exhibición ante el retirado Roy Jones Jr.
Ahora, Iron Mike sentenció: “Creo que la peor droga del mundo es esta cámara, creo que supera al azúcar. Sí, la gente grande e inteligente no puede dejar de quererse demasiado”. Así, señaló que la ambición y la fama son peores que cualquier otra cosa y qué él mismo ha vivido el costo que tiene la televisión y la popularidad. (Tomado de Infobae).
A finales del año pasado, en una entrevosta al youtuber Logan Paul, Tyson reconoció tener una personalidad de adicto, pero explicó que hoy en día la marihuana le ha permitido alejarse de otro tipo de adicciones como la cocaína, el alcohol y el sexo: “Esto es algo que me da buena energía, positiva. Yo necesito encontrar algo que llene la energía que tengo”. En ese sentido aseguró que el boxeo lo ayudó durante mucho tiempo a encauzar esa energía interna: “Yo quería que los boxeadores grandes me respeten, ese era mi objetivo”.
En aquella oportunidad, recordó además su experiencia al haber probado una sustancia llamada 5-MeO-DMT, que es producido en grandes cantidades por Bufo alvarius, una especie rara de sapo comúnmente conocida como el sapo del río Colorado o el sapo del desierto de Sonora. Ese episodio se remonta a enero de 2019 y según él le cambió la vida. “Es completamente diferente, tu cuerpo se queda aquí y tu alma se despega”, sostuvo y agregó: “Te hace sentirte Dios por un momento”.
«Yo me drogaba con cocaína y me había dado por vencido en la vida, pero cuando probé el sapo fue un boom. Me di cuenta que estaba muerto”. Fue así que su forma de pasar los días cambió por completo, logró bajar más de 30 kilos, volvió a entrenar y pudo regresar al combate.
En la entrevista, rememoró además cómo fue su experiencia con la dimetiltriptamina (DMT), uno de los alucinógenemos más potentes que se conocen. «Yo sentía que el sol se abría en dos y el aire venía hacia mí y entonces le dije a mi compañero ‘¿estás viendo esto?’. Y él: ‘¿Ver qué?’. ‘Deja de bromear conmigo, se que lo estoy sintiendo’. ‘Pero Mike no veo nada’. Y yo insistía, ‘Deja de jugar conmigo’. Pensé que me estaban haciendo una broma porque con los muchachos solemos jugarnos bromas entonces yo le decía ‘sé que tu también lo estás viendo’”, contó el ex campeón de los pesados que explicó que ese tipo de alucinación se extiende durante algunos minutos y puede durar hasta 20.
Pese a todo esto, Tyson insistió en el último episodio de su podcast que la cámara es la mayor droga que existe y que cualquiera puede sucumbir ante ella.
En la actualidad, el ex boxeador campeón mundial lidera un proyecto de cannabis es lo que realmente lo tiene entretenido. La sede de Tyson Ranch está alejada de la civilización, solo rodeado de campos de golf y de una parcela con 418 acres de desierto virgen de California.
Allí “hay planes para un hotel de lujo y tiendas minoristas e instalaciones para glamping, un anfiteatro para conciertos y la Universidad de Tyson, donde los expertos enseñarán técnicas de cultivo de cannabis a los futuros agricultores. También habrá un río lento que corre por todo el lugar”, reveló hace algunos años Rob Hickman, uno de los principales inversores del lugar.
Fueron él y Tyson quienes alguna vez bromearon en un podcast sobre que fumaban cerca de 40 mil dólares de marihuana al mes. Pero lo cierto es que todo este cambio en su vida a convertido al ex púgil, dueño de todas polémicas durante la década del 90, en un hombre que ha encontrado la paz, de una manera singular, y que ahora planea ayudar a otras personas a través de su extravagante emprendimiento.