El equipo inglés avanza a cuartos de final tras vencer en el global 3-0 a los españoles
Londres, Inglaterra
Triste despedida del Atlético de la Champions. El Chelsea, como en la ida, fue muy superior y no dio ninguna opción a los rojiblancos, que se despiden en los octavos de final con la cabeza baja y la sensación de no haber mostrado su verdadero potencial.
Los goles de Ziyech y Emerson dejan un contundente 3-0 global en la eliminatoria, un duro mazazo del que los rojiblancos deben reponerse ya para su gran objetivo: la Liga.
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No se encontró en ningún momento cómodo el Atlético, superado en todo momento por el centro del campo inglés, dominador en el medio con Kanté y Kovacic. Apenas un contragolpe que no logró finalizar Joao Félix y un par de penaltis reclamados por los colchoneros (un empujón en el área a Suárez, un leve agarrón a Carrasco) inquietaron al Chelsea, que merodeaba constantemente el área rival.
Un mal chut de Werner fue el preludio del gol blue, que sin embargo no llegó gracias a su dominio sino en un contragolpe. Un centro al área despejado fue suficiente para que el Chelsea montara un ataque devastador. Harvetz lo lanzó, Werner avanzó por la izquierda y su centro lo remató Ziyech al fondo de la red.
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Pese a que Joao Félix probó fortuna con un disparo desde fuera del área que blocó Mendy, el dominio siguió siendo local. Eso sí, sin ocasiones más allá de un disparo desviado de Kovacic. El descanso no le podía venir mejor al Atlético de Madrid.
Simeone movió el equipo al descanso, consciente de que algo tenía que cambiar. La entrada de Hermoso dio paso a un sistema con tres centrales, pero el rumbo del partido no solo no cambió sino que lo raro fue que el Chelsea no sentenciara la eliminatoria.
Tuvo que ser Oblak el que sostuvo al Atlético. Werner le ganó la espalda a la zaga colchonera y su disparo lo desvió el esloveno como pudo. Después, el meta se lució ante un disparo con malicia de Ziyech.
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El Cholo había metido ya a Dembélé, pero sorprendió con su cambio a media hora para el final. Fuera Suárez, que sigue con su asombrosa mala racha de más de cinco años sin marcar fuera de casa en la Champions, dentro Correa.
Sin embargo, nunca logró inquietar el Atlético a un Chelsea superior y la eliminatoria quedó sentenciada con la roja directa que vio Savic. Solo un disparo de Joao Félix en el descuento estuvo a punto de dar algo de emoción, pero Mendy hizo un paradón y la respuesta del Chelsea fue una contra en la que Emerson puso el definitivo 2-0 final.
