Tegucigalpa, Honduras
Hace 74 años (15 de marzo de 1948) el entonces presidente de la República, Tiburcio Carías Andino inauguró el Estadio Nacional -ahora bautizado con el nombre Chelato Uclés- convertido en uno de los espacios públicos más importantes de la historia deportiva de nuestro país. Además es la sede de los equipos Olimpia y Motagua, como también lo ha sido de la Selección Nacional, que hace más de una década se mudó para el Olímpico de San Pedro Sula.
Tegucigalpa era la única capital centroamericana que no contaba con instalaciones deportivas adecuadas porque en El Salvador ya se había levantado el Flor Blanca, en Costa Rica el estadio La Sabana, en Nicaragua el parque de béisbol que se bautizó con el nombre de Anastasio Somoza y Guatemala construía su estadio olímpico para ser escenario de los Juegos Centroamericanos de 1950 (el Mateo Flores).
Un grupo de entusiastas deportistas encabezados por don Esteban Díaz, presentaron la idea al gobierno del general Carías Andino en 1946 y la iniciativa de ley la introdujo al Congreso Nacional el Ministerio de Educación Pública a cargo del profesor Ángel G. Hernández para emitir el decreto correspondiente y asignarse la partida presupuestaria correspondiente para la construcción del Estadio Nacional.
Una vez aprobado el decreto por el Poder Legislativo presidido por el abogado Plutarco Muñoz, el diseño estuvo a cargo del arquitecto Francisco Prats y las obras de ingeniería por los profesionales Luis Ulloa y Rafael Blanco, iniciándose la obra a finales de este año porque se avecinaba el término del gobierno y querían dejar, junto a la terminal aérea de Toncontín, como obras significativas de su administración.
Fue construido con el propósito de promover el deporte entre la juventud que se congregaba en el campo España, ubicado en las proximidades de San Felipe donde hoy está el Instituto del Tórax, en el campo Imperial donde hoy se levanta la Nunciatura Apostólica, en la cancha de El Chile, en La Isla, en El Birichiche, en La Bolsa, en el campo del «Nueva Era» donde hoy está el edificio de Banadesa, en la cancha de El Prado a orillas del río San José que hoy ocupa un sector de la vía conocida como el bulevar Kuwait, el campo Motagua bajo el puente Mallol y en la cancha de Viera al costado norte del Seminario Mayor.
Fue concebido para que en él se jugara béisbol y fútbol, dejándose alrededor de la grama una pista para competencias de atletismo, que sirviera además, para el desarrollo de desfiles cívicos como se ha acostumbrado año con año.
El Estadio Nacional está ubicado en el barrio Morazán, al pie del cerro Juana Lainez, y tiene capacidad para reunir a unos 38 mil aficionados. Cuenta con una estructura circular, la cual se divide en cuatro localidades: sector popular (sol), preferencial (sombra), silla y los sectores de palcos, así como las cabinas de transmisión de radio y televisión.
Existe una confusión con su nombre oficial, muchos lo llaman Tiburcio Carías Andino por la placa que hay en el estadio que dice que se construyó bajo su mandato, pero su nombre es Estadio Nacional, leyenda que aparece arriba del conocido portón azul.
La confusión se dio porque la ya existente y ahora desaparecida Federación Deportiva Extraescolar de Honduras lo registró ante FIFA con el nombre de Tiburcio Carías Andino, y por eso los nombramientos de partidos internacionales y los datos en internet de la instalación mencionan el nombre del expresidente hondureño.
INAUGURACIÓN
La instalación deportiva se inauguró con una doble y atractiva jornada. Los actos empezaron a las 10 de la mañana con una ceremonia que presidió el general Tiburcio Carías Andino quien se hizo acompañar por su gabinete de gobierno y altos funcionarios de su administración.
Después se disputó una doble y atractiva jornada. Por la mañana se jugó un partido de béisbol entre las selecciones de Cuba, dirigida por Sungo Cabrera y la de Honduras a cargo de otra gloria de la pelota chica antillana, Isidro “El Papi” Fabré, partido que terminó 3-10. Y, por la tarde, se disputó un encuentro de fútbol correspondiente a una cuadrangular que involucró a Guatemala, Costa Rica, Panamá y Honduras.
En el conjunto nacional dirigido por el argentino Pedro Biondy, destacaban Zacarías Arzú, quien en la mañana vistió la camiseta de beisbolista, Raúl “Joyo Chele” Barahona, Armando “Majoncho” Sosa, Rodolfo “Popo” Godoy, Jacobo “El Tico” Godoy, Rigoberto “Coyote” Castro, Alfonso González, Cara de Hacha Bandy, Julio Najarro, “Peyito” Velásquez y otras estrellas del fútbol hondureño.
La instalación deportiva ha sido el marco esplendoroso de grandes hazañas de la Liga Nacional, Liga de Campeones de la CONCACAF y de eliminatorias mundialistas. Su verde pasto ha visto correr a los mejores jugadores en la historia del fútbol hondureño y fue testigo de la clasificación de Honduras a su primera copa del mundo: de España 1982.
Por su capacidad, se ha utilizado como escenario de las tomas de posesión presidenciales, eventos religiosos y musicales. Según está establecido en las leyes de Honduras, y considerando que la instalación pertenece al Estado –administrado por la CONAPID– a partir del regreso democrático al país, las tomas de posesión se hacen en esta instalación deportiva, cada 27 de enero de cada cuatro años.
TESTIGO DE LA CLASIFICACIÓN AL PRIMER MUNDIAL
En el Estadio Nacional se logró la clasificación a una primera copa del mundo, España 1982, y ha clasificado a mundiales juveniles Sub-20 y Sub-17. El 14 de diciembre de 1981, Honduras derrotó a Panamá 5-0 en Tegucigalpa, para pasar a la ronda final junto a El Salvador. Luego de su pase, la bicolor recibió la sede de la
hexagonal final. En esa justa también participaron México, Canadá, Haití y Cuba.
El momento más emotivo se vive en noviembre de 1981 cuando la Selección Nacional de la mano de Chelato Uclés clasifica al Mundial de España 82, al ganar la hexagonal en forma invicta venciendo 4-0 a Haití, 2- 0 a Cuba, 2-1 a Canadá y empatando 0-0 con El Salvador y México.
Contrario a la clasificación del Mundial de Sudáfrica, donde Honduras jugó de visita en El Salvador y gracias al resultado de Estados Unidos ante Costa Rica, clasificamos a una segunda copa del mundo. En el Estadio Olímpico se jugaron 12 partidos de los cuales se ganaron 10 y se perdieron los dos últimos, que pusieron en peligro la clasificación a Sudáfrica.
Para la copa del mundo de Brasil 2014, el equipo nacional dirigido por el colombiano Luis Fernando Suárez solamente jugó un partido contra Panamá y en el actual proceso con el también cafetero Jorge Luis Pinto no se ha disputado ningún juego eliminatorio.
En el Nacional también se han presentado destacados equipos como por ejemplo el Santos de Brasil que incluía en su plantel a Pelé, que enfrentó al Olimpia empatando 0-0, el Sarajevo de Yugoslavia que perdió 2-1 con el Motagua. Otro equipo de renombre que pisó el césped del Nacional fue el Real Madrid que empató a uno con la Selección de Honduras y otros equipos famosos como Nacional y Peñarol de Uruguay, Colonia de Alemania, Brujas de Bélgica, Celta y Atlético Madrid de España, River Plate de Argentina que traía en sus filas a Enzo Francescoli, Américo Gallego, Sergio Goicoechea, Antonio Alzamendi, Rubén Da Silva,
Norberto “Beto” Alonso, entre otros.
En 1990 el Estadio Nacional fue escenario de la apertura y y clausura de los IV Juegos Deportivos Centroamericanos, en donde Honduras ganó la medalla de oro en fútbol. También en esa instalación, Olimpia se coronó campeón centroamericano en tres ocasiones, y una vez Motagua.