Barranquilla, Colombia
La selección de Colombia cumplió con su obligación para seguir soñando con el Mundial de Qatar: le ganó como local 2-0 a Bolivia gracias a los goles de Luis Díaz y Miguel Borja. Así, quedó a un punto de la zona de repechaje, en la que aparece Perú, un punto por encima. En la última jornada, visita a Venezuela el martes 29 y dependerá de lo que suceda con los incaicos, que reciben a Paraguay.
Ante la urgencia, Colombia buscó con mucho empuje desde el inicio. Con Luis Díaz como la bandera del desequilibrio individual, llegó tres veces de forma clara en los primeros 25 minutos; la última, con un remate alto de James Rodríguez. Pero no pudo abrir el marcador, ante un Bolivia que apeló al orden para que no se advirtieran sus grietas defensivas y con poco apetito en ataque. O, al menos, sin precisión para avanzar más allá de los tres cuartos de campo.
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Debió esperar a los 38 minutos el elenco conducido por Reinaldo Rueda para volver a gritar un gol luego de siete partidos: fue Luis Díaz, con una acción individual de derecha al centro, y un remate combado que quebró la oposición del arquero. Así, el delantero del Liverpool le devolvió la sonrisa a Colombia, que pudo ampliar el score a los 40, cuando un intento de Muñoz dio en el ángulo.
A ritmo de entrenamiento, frente a un adversario que nunca estuvo a la altura, Colombia aceleró y disminuyó la voracidad por momentos, pero siempre dio la sensación de estar a punto de incrementar la ventaja. A los 13, por ejemplo, Muñoz perdió un gol increíble, con un cabezazo en soledad y de sobrepique, que salió desviado.
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Los cambios le hicieron bien a Colombia. Juanfer Quintero, Mateus Uribe y Miguel borja le dieron frescura al ataque. Y a los 26 minutos del complemento, Cuadrado inició la acción, Luis Díaz centró y Borja empujó al gol: 2-0.
Y Mateus Uribe, con un cabezazo postrero a los 44′, decoró el score, que pudo ser 4-0 con el gol de Borja que fue anulado por offside a instancias del VAR.
Así, Colombbia sigue soñando, más allá de que sabe que no depende de sí mismo para evitar ver el Mundial por televisión.