París, Francia

El Real Madrid ha ganado la Champions League. Ha ganado su Champions League. La 14ª, la que el destino les tenía preparadas tras, ojo, tres remontadas ‘imposibles’ para todos menos para ellos. Su última víctima fue el Liverpool, en una épica final en el Stade de France en París que les hace ser, de nuevo, el mejor de Europa.

Una que se hizo hasta corta, por la tremenda espera que hubo hasta el pitido inicial debido a problemas en la seguridad. Y que ha dejado al Real Madrid, otra vez, como rey del Viejo Continente. Como campeón. Como el mejor del Viejo Continente. Y ya van 14 veces.

Ya van casi tantas finales ganadas en Champions League como finales disputadas. Porque hay que remontarse, y mucho, para encontrar una derrota en una cita de tal importancia en la historia del Real Madrid. El Liverpool, otro de los ‘viejos rockeros’ de Europa, poco pudo hacer.

Courtois, simplemente Courtois

Y eso que bien se podría decir que el mejor del partido fue Thibaut Courtois. El belga sostuvo a su equipo. Levantó un muro del metal más indestructible de la historia ante el que chocaron Mané y, sobre todo, Salah. El egipcio, hasta en tres ocasiones.

Pero en París el belga, que vio cómo el propio Real Madrid le dejaba sin la que hubiera sido en 2014 su primera Champions League, en el Atlético, fue el gran héroe. Sacó de quicio a Salah, mandó al palo un tiro a bocajarro de Mané… y el Liverpool ya se veía venir lo peor.

Lo vio cuando Benzema batió a Alisson. El gol no subió al marcador por fuera de juego, en la gran polémica del partido, pero ya lo vio. Vio que la fiesta se podía ir a Madrid. Y la fiesta se fue a Madrid a ritmo de Brasil.

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Al ritmo de Vinicius, que remató a gol un centro preciso desde la derecha de Fede Valverde. Arnold se lo comió por completo, y el quién sabe si Balón de Oro en un futuro cada vez más cercano embocó a las redes.

No hizo falta mucho más que una buena acción en ataque y que Thibaut Courtois. Porque la que le sacó a Salah, en el 82, ya dejó claro que esta Champions, por si había alguna duda tras lo visto ante el PSG, el Chelsea y el Manchester City, iba a ser del Real Madrid.

Es del Real Madrid. De un Real Madrid excelso en el acierto en ataque, como se vio en las acciones de Benzema y de Vinicius, y con Thibaut Courtois en la portería. Uno que, cuando va arriba, no mastica. Directamente muerte. Directamente hinca los colmillos para dejar K.O. a su rival. Y Thibaut Courtois.

El belga se ganó su primera Champions League. Se la ganó, y se la dio al Real Madrid. La 14ª ya está aquí.