Varsovia, Polonia

El exjugador de Los Ángeles Lakers, el ucraniano Slava Medvedenko, está vendiendo sus dos anillos de campeonato de la NBA para recaudar fondos para su país y apoyar a los niños ucranianos mediante la restauración de la infraestructura deportiva de las escuelas del país devastado por la guerra y el lanzamiento de una red de clubes deportivos sociales.

Medvedenko, de 43 años, fue ala-pívot en los equipos campeones de los Lakers en 2001 y 2002, jugando junto a Kobe Bryant y Shaquille O’Neal.

«Queremos restaurar los gimnasios porque el ejército ruso bombardeó más de cien escuelas», dijo a The Associated Press por teléfono el domingo. «Nuestro país necesita mucho dinero para arreglar las escuelas. Los gimnasios deportivos serán los últimos en arreglarlo. En Ucrania, tenemos invierno y los niños necesitan jugar adentro».

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La subasta se realizará desde el miércoles hasta el 5 de agosto. La compañía con sede en Laguna Niguel, California, estima que ambos anillos recaudarán al menos $100,000.

Medvedenko dijo que decidió vender los anillos después de subir al techo de uno de los edificios más altos de su barrio de Kyiv y ver los cohetes lanzados por las fuerzas rusas atravesando el cielo nocturno.

«En ese momento simplemente decidí: ‘¿Por qué necesito estos anillos si solo están en mi caja fuerte?'», dijo Medvedenko. «Tengo que venderlos para mostrar liderazgo a las personas, para ayudar a mi pueblo ucraniano a vivir mejor, para ayudar a los niños».

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Medvedenko habló desde Varsovia, Polonia, donde organizó un partido de básquetbol benéfico con entradas agotadas para recaudar fondos para los refugiados ucranianos que cruzaron la frontera para escapar de la guerra.

«En Ucrania, sientes que es guerra, cohetes, alertas aéreas. Estás tan acostumbrado a ese tipo de presión», sostuvo. «Tan pronto como cruzas la frontera y ves cómo la gente vive una vida normal, es un mundo diferente».

Medvedenko está casado y tiene dos hijas, de 16 y 11 años, y un hijo de 10 años. Después de que Rusia invadiera Ucrania en febrero, Medvedenko envió a sus hijos a vivir con su abuela en otra parte del país.

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«Después de quedarse durante un mes y medio, me llamaban todo el tiempo y me preguntaban: ‘Papá, ¿podemos volver a casa? Queremos estar contigo y con mamá'», recordó.

Cinco meses después de la guerra, Medvedenko ha reunido a su familia en Kyiv. «Tenemos alertas aéreas casi todos los días. A veces son tres o cuatro veces al día», dijo. «Los niños están tan acostumbrados. Juegan en nuestro patio trasero. Ni siquiera dejan de jugar, están acostumbrados».

Medvedenko ha servido en las fuerzas de defensa territorial de Ucrania durante la guerra. Más allá de sus esfuerzos humanitarios durante la guerra, Medvedenko tiene objetivos a largo plazo para ayudar a su país.