Rio de Janeiro, Brasil
Un tribunal deportivo de Brasil sancionó a cuatro futbolistas juzgados por participar en una red que amañaba partidos para favorecer a una mafia de apuestas, a uno de los cuales lo expulsó de las canchas para el resto de su vida, mientras que absolvió a otro.
Con la sentencia de este martes contra los cinco futbolistas, se elevó a trece el número de acusados ya juzgados por el Superior Tribunal de Justicia Deportiva (STJD), tres de los cuales fueron condenados con la expulsión definitiva de las canchas y otros seis con suspensiones que varían desde los 360 días hasta los 1.000 días. Tan solo dos de los acusados han sido absueltos hasta ahora.
Los condenados aún pueden presentar recursos ante el plenario del tribunal, lo que les permite juzgar al menos en el exterior hasta que el organismo se pronuncie definitivamente sobre su situación.
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En la sesión la Quinta Comisión Disciplinaria del Tribunal condenó con la expulsión definitiva de las canchas al delantero Ygor Catatau, exjugador del Vasco da Gama y actualmente en el fútbol iraní, así como al pago de una multa de 70.000 reales (unos 14.000 dólares).
Catatau fue hallado culpable de haber servido de intermediario entre la mafia de las apuestas y cuatro de sus entonces compañeros en el club Sampaio Correa que aceptaron sobornos a cambio de forzar un penalti en un partido por la segunda división de la Liga.
En la misma sesión contra los cinco jugadores del Sampaio Correa el tribunal sancionó con 720 días de suspensión y multas por 14.000 dólares al defensa Paulo Sérgio, actualmente jugador del club Operario, y al lateral Matheuzinho, del Cuiabá.
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Igualmente este martes el centrocampista André Queixo, que actúa en un club de Iraq, fue sancionado con una multa de 10.000 dólares, y el defensa Allan Godoi, jugador del Operario, fue absuelto por falta de pruebas.
En los juicios anteriores el tribunal deportivo expulsó de las canchas por el resto de sus vidas a Matheus Gomes (sin club) y Gabriel Tota (Ypiranga) y sancionó con suspensiones de 1.000 días a Paulo Miranda (sin club), de 760 días a Moraes (Aparecidense) y de 380 días a Fernando Neto (Sao Bernardo) y Kevin (Bragantino).
Eduardo Bauermann, jugador del Santos, fue sancionado con 12 partidos de suspensión, e Igor Cariús (Sport) fue absuelto.
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Los miembros del tribunal concluyeron que al menos once de los acusados aceptaron sobornos de hasta 20.000 dólares a cambio de forzar tarjetas amarillas o rojas, cometer penaltis o perjudicar a sus equipos para favorecer a la mafia de las apuestas.
La red de manipulación de resultados fue destapada a comienzos de este año y se sospecha que promovió fraudes en al menos 13 partidos disputados desde el año pasado, incluidos 8 de la liga de primera división.
La Fiscalía del estado de Goiás ya presentó cargos contra 16 personas, pero versiones de prensa indican que al menos medio centenar de jugadores que han sido citados en las investigaciones. (Información EFE).
