Londres, Inglaterra
Usain Bolt, fanático de Manchester United, hizo historia en Old Traffod después de lo que fue su sueño frustrado en el fútbol. El exatleta jamaiquino convirtió un golazo en un partido benéfico que cada año organiza Soccer Aid a beneficio de Unicef.
Con el dorsal 9″58, haciendo referencia a su marca en el récord mundial de los 100 metros, Bolt recibió una asistencia de Francesco Totti y abrió el marcador con una definición cruzada a la red en un duelo que enfrentó a un combinado de la Selección de Inglaterra contra Resto del Mundo, en el marco de su quinta participación.
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Asa Butterfield igualó el partido, Paul Scholes lo dio vuelta, Robbie Keane remontó el marcador con dos goles consecutivos y el presentador de televisión Kem Cetenay decoró el resultado para la victoria del Resto del Mundo por 5-2.
El evento se organiza desde 2006, con una recaudación total de 90 millones de libras, y todos los años se agotan las entradas. Este año, con Bolt a la cabeza y las participaciones de los argentinos Mauricio Pochettino y Hernán Crespo, los organizadores recaudaron algo más de 14 millones de libras. El monto se destina íntegramente a distintos proyectos de Unicef.