Puntarenas, Costa Rica
El hondureño Roger Rojas anunció en febrero pasado que se retiraba temporalmente del fútbol por motivos de su salud, cuando recién había firmado contrato con el Puntarenas en noviembre del 2022.
Este jueves, Rojas, que ocupa el cargo de asistente técnico de Puntarenas de Costa Rica, dio una entrevista para el programa “Deportes del Puerto” y reveló muchos detalles de su salud, donde todo marcha muy bien.
Dijo que mantiene la esperanza de regresar a jugar fútbol profesional el próximo año ya que su salud ha ido mejorando en los últimos meses.
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“Muy bien gracias a Dios, la verdad que mi salud ha ido mejorando, le decía antes de la entrevista que aquí en Costa Rica la salud es muy buena, he tenido muchos ángeles, me han ayudado muchísimo los que me están viendo, los doctores, las enfermeras, todo el personal. En el hospital médico han sido muy amables conmigo y también aquí en Puntarenas y eso me ha ayudado mucho”, comenzó diciendo Roger.
El exjugador de Olimpia destacó que se ha encontrado con personas solidarias con él y toda su familia y aseguró que tiene la fe de regresar al fútbol.
Gracias a Dios han tenido un corazón solidario, no solo conmigo sino que con toda mi familia porque cuando pasan estos problemas uno arrastra a todos, los hijos, mi esposa. En este caso ellos han sido muy cordiales con mi familia y conmigo.
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Le consultaron si tenía esperanzas de volver a jugar de manera profesional y resaltó que no pierde la fe. «Tengo mucha fe que el otro año, me pongo mis tacos y vuelvo a jugar», indicó.
«Yo le digo a mi hijo que voy a volver a jugar, yo tengo guardado mis tacos, no me los he vuelto a poner y lo haré hasta que me digan ‘ya podés Roger’. Y ahí están guardados, esa es mi fe», amplió.
Recordó cómo se dieron las cosas sobre su salud, dejando claro que Dios lo estaba cuidando de algo mucho peor.
«Soy muy creyente y me pongo a pensar, Jugaba, no jugaba, que los papeles y que más días, más días y era Dios que me estaba diciendo: ‘no podés jugar ahorita’. A veces uno quiere forzar las cosas y ese fue el mensaje y la enseñanza que me dejó mi Dios, las cosas no hay que forzarlas y era porque me estaba cuidado de algo que podría ser peor, por eso Dios es maravilloso con uno», explicó.
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“En este proceso que yo estoy atravesando, uno se da cuenta que tienes que aceptar las cosas que Dios le pone porque hay una razón, un por qué. Yo estaba forzando jugar, jugar y jugar, pero Dios me estaba protegiendo y decía no, no, no. Al final Dios es tan perfecto y no se equivoca, todo lo que pasa es para bien”, dijo.
Rojas también aseguró que junto a su esposa decidieron quedarse a vivir a Costa Rica por diversos factores, entre ellos, la salud y educación que brinda el país centroamericano.