Alemania
El director de relaciones públicas de Sadio Mané, Bacary Cissé, afirmó que la salida del delantero del Bayern de Múnich no fue por razones futbolísticas sino porque no podían entender cómo una estrella africana era su jugador mejor pagado.
Mané llegó hace un año al equipo bávaro como una estrella, embolsándose más dinero que cualquier otro de sus compañeros, algo que de acuerdo con Cissé, generó problemas.
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«Vender a Mané no fue una decisión futbolística por parte del Bayern. El sueldo de Sadio molestaba a los alemanes, no entendían cómo un africano entraba en el club y se convertía en el que más ganaba. Así que todos querían deshacerse de él», reclamó en palabras a After Foot RMC.
También añadió que el jugador se entregó por completo a su equipo y que la respuesta no fue la mejor. Mané se mudó al Bayern por 35 millones de euros el año pasado, pero luchó por establecerse en Alemania y anotó solo 12 goles para el club, mientras que también tuvo una pelea de alto perfil con su compañero de equipo Leroy Sané.
Según los informes, cuando se incorporó procedente del Liverpool, Mané recibió un salario anual de más de 20 millones de euros, lo que significa que era de los que más ganaba en el club alemán.
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«Sadio no tiene nada que demostrar a los alemanes. No se convirtió en lo que se ha convertido gracias al Bayern, sino gracias al Liverpool. El Bayern fue un desagradecido. Le estaban pagando a un africano todo ese dinero y eso les perjudicó», agregó.
Insistió en que la dirigencia germana se portó mal con él después de todo lo que puso de su parte.
«Mané fue un profesional hasta el final, pero los responsables del Bayern no fueron justos. Sadio no les robó su dinero. Desde la primera reunión con el Bayern les dio su palabra de que ficharía sin hablar del sueldo», sentenció.
