Estados Unidos
LeBron James cumple este sábado 39 primaveras y lo hace en un momento de su carrera en el que quizás no sea el mejor de la liga, pero desde luego sí tiene un nivel tan elevado que sorprende la vigencia con la que aún domina en pista.
El tiempo no pasa por él y, lejos de plantearse la retirada, el físico y la salud todavía le acompañan lo suficiente como para pensar en un largo camino de corto más allá de los 40.
A día de hoy, LeBron está entre los 20 máximos anotadores de la NBA esta campaña con 25,4 puntos por partido, entre los 10 máximos asistentes con 7,4 por noche y entre los 30 máximos reboteadores con 7,6 por encuentro. Podrían parecer números normales si no fuera porque se trata del jugador más veterano de la liga.
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En su temporada número 21 en la NBA, lidera a estos Lakers en puntos y asistencias y es el segundo máximo reboteador del equipo sólo por detrás de Anthony Davis. También es el que más triples mete (2.3 por encuentro) con el mejor porcentaje de acierto, el que más balones recupera junto a Cam Reddish (1.4 de promedio) y el segundo con más minutos (34.3 por partido).
LeBron tiene contrato vigente con los Lakers hasta el próximo mes de junio, con la opción de jugador de ampliarlo por una temporada más a razón de 51,5 millones de dólares.
Esta opción de salida en su contrato no fue casualidad, sino que se estableció así para coincidir con la posible primera temporada de Bronny James, su hijo mayor. LeBron siempre ha manifestado que le gustaría compartir equipo con su ‘heredero’ y se deja esa puerta abierta como opción de ofrecerse al equipo que le elija en el draft.
Pero independientemente de este vínculo familiar, sería extraño ver a LeBron lejos de Los Ángeles una vez que su vida extradeportiva está tan arraigada en esta ciudad. Sus negocios e inversiones están en California y sólo la oportunidad de jugar con Bronny le harían hacer las maletas.
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Sobre su retirada, no hay duda que será después de los 40 años. Si le respetan las lesiones y disputa la temporada 2024/2025, entraría ya entre los 12 jugadores más veteranos en jugar en la NBA.
Lo que parece aún lejano, que no imposible, es que pueda batir el récord absoluto de longevidad como profesional, que está en manos de Nat Hickey, quien jugó con 45 años y 363 días a finales de los años 40.
La clave estará también en la próxima negociación de los derechos televisivos de la NBA para 2025, que darán un buen pellizco adicional a los salarios de los jugadores, y que, por interés mutuo de la liga y la estrella de los Lakers, sería una negociación más favorable con unos últimos años de «King James» sobre la mesa. (Con información EFE).