Nashville, Estados Unidos

Con la presencia del hondureño David Ruiz, quien ingresó de cambio a los 80 minutos por Julián Gressel y con el agónico gol en el descuento de Luis Suárez al 95′, el Inter Miami empató 2-2 en la cancha del Nashville SC este jueves en la ida de los octavos de final de la Copa de Campeones de la Concacaf.

Las Garzas lo pasaron mal en el Geodis Park, donde Jacob Shaffelburg dio una doble ventaja a los locales, pero en la segunda mitad aparecieron la pareja de sudamericanos para lograr la igualdad.

A los cuatro minutos, Nashville agarró dormida a la defensa rival: Shaq Moore apiló varios jugadores y asistió a Jacob Shaffelburg, que sacó un bombazo imposible para Drake Callender para el 1-0.

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El inicio del complemento fue un calco al del primer tiempo. Inter Miami incómodo y, tras un error de Drake Callender en la salida, el canadiense Jacob Shaffelburg sacó un fierrazo que se clavó en el ángulo para el 2-0.

Cuando el panorama era negro para Inter Miami apareció Leo. Luego de una buena pared entre Luis Suárez y Diego Gómez, la pelota cayó en los pies de Messi, que enganchó un sacó un remate a colocar, imposible para el arquero. Una marca registrada de Leo, que ha hecho cientos de estos. Un tanto importantísimo para el equipo de la Florida, sobre todo porque el gol de visitante vale doble.

El gol del astro argentino despertó al Inter Miami, que fue en busca de más. A los 11 minutos, un buen centro rasante encontró a Diego Gómez entrando solo por el medio. El volante paraguayo la empujó y puso el 2-2. Sin embargo, el línea levantó la bandera y cobró offside. Y, efectivamente, lo era. El VAR corroboró el cobro y le dio la razón.

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Cuando se estaba bajando el telón del partido, el lateral izquierdo Shaquell Moore, que dio la asistencia en el 1-0, entró al área y, tras un enganche, definió cual delantero para poner el 3-1. Un golpazo para el Inter Miami. Aunque el VAR intervino por un offisde previo en la jugada y se anuló el gol de Nashville.

El árbitro agregó siete minutos, una eternidad para un Nashville que ya había bajado su ritmo y se había conformado con el 2-1. Y ese fue el peor erro que pudieron haber cometido. Metidos dentro de su propia área, un centro de Sergio Busquets cayó en el punto de penal, donde estaba Luis Suárez, de discreto partido, para anotar el 2-2 a los 95 minutos. Agónico.