El Barcelona cayó 0-3 ante el Mónaco en el Trofeo Joan Gamper, en lo que fue el estreno de Hansi Flick al frente del equipo azulgrana. El conjunto catalán, que presentó un once repleto de jóvenes y jugadores poco habituales, mostró varias carencias defensivas frente a un rival con experiencia en competiciones europeas. Este resultado puso fin a una racha de once victorias consecutivas en su trofeo, recordando la última gran derrota sufrida en 1994 ante el Valencia.
Durante la primera mitad, el Barça logró mantener el empate sin goles, aunque fue el Mónaco quien terminó dominando el encuentro. Los azulgranas, con un estilo de juego directo y una presión adelantada, intentaron imponer su ritmo con un once experimental. Marc Bernal lideró la medular junto a los jóvenes Marc Casadó y Pablo Torre, mientras que en la delantera destacaba Pau Víctor, uno de los nuevos fichajes, acompañando a Lewandowski y Raphinha.
A pesar de algunos destellos individuales, como un remate de Íñigo Martínez en un saque de esquina y un disparo centrado de Lewandowski, el Barcelona no consiguió materializar sus ocasiones. El Mónaco, por su parte, aprovechó los desajustes defensivos del Barça en la segunda mitad, consiguiendo tres goles que sentenciaron el partido.
Hansi Flick, en su debut como entrenador del Barcelona, estuvo activo desde la banda, corrigiendo y apoyando a sus jugadores. Sin embargo, los azulgranas no lograron responder al juego físico y rápido de su rival, dejando muchas dudas sobre su rendimiento de cara a la próxima temporada.