Roma, Italia
En un mercado con mucho movimiento gracias a los numerosos y sonados fichajes del Juventus y del recién ascendido Como 1907 que entrena el español Cesc Fábregas, han sido la decisión del argentino Paulo Dybala de rechazar el dinero saudí y quedarse en el Roma, así como el ‘Caso Osimhen’, que no encontró salida, las operaciones más importante en el fútbol italiano.
Recuperadas caras ya conocidas como las de Pepe Reina (Como), Morata (Milan) o Lukaku (Nápoles), de vuelta en Italia; con todo el movimiento en los banquillos, pues hasta 13 entrenadores son nuevos, entre ellos los de Nápoles, Milan y Juve; y con las nuevas adquisiciones como la de los españoles David De Gea (Fiore) y Sergi Roberto (Como), o los argentinos Nico Paz (Como) y Máximo Perrone (Como); fueron dos operaciones que no llegaron a buen puerto las más importantes en la Serie A.
Dybala rechaza la faraónica oferta del Al-Qadsiah
Porque cuando todo parecía decidido, cuando se daba por hecha la marcha de la ‘Joya’ al Al-Qadsiah de Míchel y Nacho Fernández, equipo que le prometió 25 millones de euros netos por temporada durante 3 años, apareció una publicación en Instagram del jugador argentino para dar una alegría a la afición romanista, que acudió incluso a su domicilio para alentar a su «nuevo» fichaje.
Todo en un contexto en el que el propio club italiano veía con buenos ojos su salida para liberar su elevado salario. Pero Dybala supo decir no al dinero saudí y quedarse en su casa, en un equipo en el que es el líder y en el que ahora, además, estará acompañado por su compatriota Matías Soulé, al que el Roma adquirió del Juventus.
Se sumaron también a las órdenes de Daniele De Rossi el ucraniano Artem Dovbyk desde el Girona, el francés Enzo Le Fée desde el Rennes, el sueco Samuel Dahl desde el Djurgarden, el meta australiano Mathew Ryan desde el Az Alkmaar, el belga Alexis Salemaekers desde el Milan, el francés Manu Koné desde el Borussia Moenchengladbach y el saudí Saud Abdulhamid para reforzar el lateral derecho, el primero de su país en la Serie A.
La ‘Juve’ quiere volver a lo más alto
Sin embargo, ha sido la ‘Juve’ la que más juego ha dado al mercado con los nombres que ha fichado y que le han servido para ir ya líder en solitario con un gran juego. El primero, el de Thiago Motta para dirigir el banquillo.
Ya desde el inicio de pretemporada le club avisó de que iba a hacer limpia y dejó fuera del proyecto al italiano Federico Chiesa, que puso rumbo al Liverpool a pocas horas del cierre.
Entraron en juego entonces nombres como los del argentino Nico González, procedente de la ‘Fiore’; el colombiano Juan Cabal, del Hellas Verona; el brasileño Douglas Luiz, del Aston Villa; el galo Khpehren Thuram, desde el Niza; su compatriota Pierre Kaluli, cedido desde el Milan; el italiano Michele Di Gregorio, portero que llegó desde el Monza; o el luso Francisco Conceincao, cedido desde el Oporto.
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Pero la operación que más costó cerrar a la ‘Vecchia Signora’ fue una en la que trabaja desde hace 8 meses, en la del neerlandés Teun Koopmeiners, al que el Atalanta ha tardado en dejar ir pese a su promesa de hacerlo.
El otro equipo que ha dado más nombres al mercado ha sido el Como de Fábregas. Al recién ascendido, que se hizo con los servicios del brasileño Gabriel Strefezza definitivamente, llegaron los españoles Alberto Moreno, Sergi Roberto y Pepe Reina; el francés Raphael Varane; el belga Ignace Van Der Brempt; los italianos Andrea Belloti, Patrick Cutrone; y los argentinos Nico Paz y Máximo Perrone, procedentes de Real Madrid y Manchester City respectivamente, entre otros tantos nombres de menos reconocimiento que hacen de este Como un recién ascendido poco habitual.
Otro combinado que ha destacado por su movimiento ha sido el Milan, que tiene su gran fichaje en el español Álvaro Morata, procedente del Atlético de Madrid. Además, sumó al francés Youssouf Fofana desde el Mónaco, al serbio Strahinja Pavlovic desde el Salzburgo, al inglés Tammy Abraham desde el Roma y al brasileño Emerson Royal desde el Tottenham.
El Inter, discreto; el Nápoles, «bloqueado» con Osimhen pero con Lukaku en la plantilla
El campeón indiscutible, el Inter, cerró su mercado de fichajes prácticamente antes de que comenzara con las incorporaciones del polaco Piotr Zielinski (Nápoles) y del iraní Mehdi Taremi (Oporto). Además, sumó al argentino Tomás Palacios y al meta español Josep Martínez. Dejó el equipo el chileno Alexis Sánchez, que recaló en el Udinese.
El Nápoles, por su parte, lidió con un mercado que empezó «bloqueado» para Antonio Conte con el caso del nigeriano Victor Osimhen, todavía parte del club aunque se entrene individualmente y no haya encontrado salida en estas últimas horas. Pero poco a poco el club fue incluyendo nuevos nombres para intentar borrar la desastrosa campaña pasada.
Los italianos Leandro Spinazzola y Alessandro Buongiorno desde el Roma y el Torino, respectivamente; el español Rafa Marín desde el Real Madrid; el brasileño David Neres desde el Benfica y al incorporación soñada por Conte, la del belga Romelu Lukaku desde el Chelsea, jugador al que ya tuvo en el Inter con una versión espectacular del delantero.
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Además, el club partenopeo consiguió incorporar sobre la bocina a los escoceses McTominay (Manchester United) y Billy Gilmour (Brighton).
La ‘Fiore’ se hizo con el sonado fichaje de David De Gea bajo palos, aunquee también incorporó al argentino Matías Moreno desde el Belgrano y a su compatriota Nicolás Valentini desde Boca; al islandés Albert Gudmundsson desde el Génova; al francés Yacine Adli desde el Milan y a los italianos Edoardo Bove y Moise Kean, desde el Roma y la ‘Juve’.
El colombiano Juan Cuadrado se desplazó hasta Bérgamo par aunirse al Atalanta, que además sumó al serbio Lazar Samardzic desde el UDinese, al luso Rui Patricio desde el Roma, y los italianos Nicolo Zaniolo (Galatasaray), Raoul Bellanova (Torino) y Mateo REtegui (Génova).
Además, el Torino se reforzó con el fichaje del chileno Guillermo Maripán desde el Mónaco y del hispano-ecuatoguineano Saúl Coco desde la UD Las Palmas. (Con información de EFE).